Santiago, 24 de octubre de 2015.- Fue principal damnificado con la improvisación con que se determinó a los pilotos que podían o no ser parte de la R3B en abril de este año. Improvisación porque una medida que debió ser federativa la terminaron resolviendo los pilotos y jefes de equipo en la noche previa a que empezara el campeonato. Y Jorge Riquelme lo dijo esa misma tarde-noche en Santa Cruz, cuando la Comisión de Rally de la Federación dejó en manos de los equipos la determinación: “me perjudicaron y no sé qué va a pasar conmigo este año”.
Para poder pelear de igual a igual con los líderes de la R3, el piloto de Yumbel adelantó en abril de este año que su presupuesto, por ser piloto privado y por ser su primer año en la categoría, no bastaría para entrar en la lucha. Sin embargo, cuando estuvo con su auto en condiciones, se metió entre los cinco mejores. Pero no fue suficiente y Riquelme, hace un par de horas, puso su auto (Renault Clio R3) en venta. “No fue un buen año y quiero replantearme todo. Todo. Incluso hasta he pensado no correr y dedicarme a brindar un buen servicio de asistencia”, comentó el ex campeón de la N2 y de la R2.
Si bien durante la entrevista en más de una ocasión mencionó la opción del retiro temporal, a los pocos minutos le retorna el tono de voz habitual para comentar que le gustaría volver a la N3, “porque los costos son mucho más acotados y algunos pilotos que me han llamado interesados en comprarme el auto me han ofrecido su N3 en parte de pago, lo que claramente estoy estudiando. Ya hablé con algunas de las marcas que me auspician y les parece bien (regresar a la N3) y tomar al 2016 como un año de transición”, dijo Jorge.