Se había autoimpuesto una sola misión: terminar la carrera. Para lograrlo, Jorge Monzón sabía que habría disfrutado la carrera. Y lo logró con un muy buen ritmo, de hecho, en el Suzuki SX4 superó a binomios de la categoría R2.
Se quedó con las dos etapas de la N3, incluso con el recién proclamado campeón Jorge Arévalo en competencia a plenitud el sábado, lo que hace aún más meritorio lo hecho por el volante que fue navegado impecablemente como acostumbra el joven Sebastián Olguín.
Por haberse vuelto en gran nivel, por quedarse con la N3 en la última carrera de la serie en la historia del Campeonato Nacional, el binomio Jorge Monzón – Sebastián Olguin, a juicio de MundoRally, se adjudica el premio Actuación Relevante del Gran Premio de Pichilemu.